Misión

Triangulación Kultural (TK) surge como un instrumento de desarrollo para nuestras comunidades, enmarcada en un círculo de retroalimentación que une tres naciones protagonistas en el holocausto más grande que hemos vivido como humanidad. Nuestro plan de acción delineado a partir del año 2006 con un objetivo claro de resignificación cultural a partir del intercambio y aprendizaje de aspectos comunes en nuestras identidades llevó a la consolidación de asociaciones civiles sin fines de lucro en: Uruguay (2010), Francia (2011). Alzamos la matriz africana de la cultura uruguaya como embanderada de acción, unión y desarrollo, como un ejemplo de convivencia a implementar a nivel mundial, honrando y ubicando a todo un país en un lugar de privilegio. Es por ello que somos testigos y partícipes de la necesaria y fundamental atención en el desarrollo de los productores de dicha cultura. Haciendo particular hincapié en la EDUCACIÓN como la vía certera de transformación y reconocimiento de nuestras diferencias como riquezas, nuestra misión parte de tomar las artes como herramienta política de desarrollo, creando espacios intergeneracionales e interculturales a partir del aprendizaje y el estudio minucioso de la cultura del Candombe.

COMITE AFROURUGUAYO POR LA RECONSTRUCCION Y DESARROLLO DE HAITI
"Haití no es un país pobre, es un país empobrecido”, fue la respuesta ante la primera inquietud referida a los lugares comunes, sin contextualización, que se repiten en los medios comerciales sobre el dato de que esta isla es la más pobre de occidente. La dignidad como delito En agosto de 1791, los esclavos de Haití iniciaron una rebelión violenta, la que finalmente condujo, siendo la primera de Latinoamérica, a la plena independencia de la nación en 1804. “Es más -dijo- es el único país en el mundo donde los esclavos pudieron liberarse. Haití fue aislado porque era un mal ejemplo” como lo fue la revolución cubana en los sesenta. En este sentido, Eduardo Galeano comenta que el principal delito de este pueblo ha sido intentar conquistar su dignidad: “En 1803 los negros de Haití propinaron tremenda paliza a las tropas de Napoleón Bonaparte, y Europa no perdonó jamás esta humillación infligida a la raza blanca. Haití fue el primer país libre de las Américas”.

Aucun commentaire:

Enregistrer un commentaire